martes, 25 de marzo de 2008

mujeres vistas por ojos ecuatorianos

Al igual que en la vida real de nuestro contexto, en el cine ecuatoriano la noción de "mujer" insiste en ser mirada como un problema social. En películas como La Tigra (Camilo Luzuriaga,1990), Sensasiones (Juan Esteban Cordero, 1991), Entre Marx y una Mujer Desnuda (Camilo Luziriaga, 1996), Crónicas (Sebastián Cordero,1995), Fuera de Juego y Cuando me toque a mí (Victor Arregui 2003 y 2007 respectivamente), Sueños en la Mitad del Mundo (Carlos Naranjo, 1999) y Un Titán en el Ring (Viviana Cordero, 2002); la existencia del personaje central femenino está expuesta como la literal y bíblica "manzana de la discordia" que siempre generarán conflictos de diversa índole que se disputan entre personajes masculinos. Algunas mujeres de estos guiones desempeñan un rol de heroinas con estructuras psíquicas de héroes. En estos films la mujer asume roles estereotipados que muchas veces rayan en la caricatura y en piezas como 1809, Mientras Llega el Día, Cara o Cruz (Camilo Luzuriaga, 2004 y 2003 respectivamente) y Filo de Amor (José R. Zambrano, 2007) llegan a caracterizaciones improbables y paroxistas.

Esas no son pernas, Qué tan Lejos y Ratas Ratones Rateros son películas en las que la presencia de la mujer cobra una dimensión distinta. En las dos primeras las crisis existenciales de las féminas son el eje dramático y están enunciadas desde una plataforma que permite una participación más activa por parte del espectador y apuntan, aunque con poco riesgo todavía, hacia una enunciación de la mujer más allá de la concepción clásica de género, sexualidad o genitalidad. En Ratas, Ratones, si bien las anécdotas por las que atraviesan las mujeres pueden ser in cliché; por otro lado la puesta en escena en las que están circunscritas, los parlamentos y las acciones proponen una lectura más cercana a la poesía que a la retórica.

*Este texto lo escribo basándome en las películas ecuatorianas que he visto y que son las que se mencionan. Algunas que he visto hace más de 15 años las debería volver a ver para enunciar un criterio sobre el tema que propongo.

No hay comentarios: